¿Cuándo decirle a un hijo que es adoptado?

Establecer cuándo es el mejor momento para decirle a un hijo que es adoptado no es algo fácil. La mayoría de los padres adoptivos desean no tener nunca que enfrentar esta situación, pero saben que deben hacerlo en algún momento. Sin embargo, postergarlo demasiado puede ser contraproducente.

¿Será muy temprano para decirle?

La naturaleza es sabia. Cuando un niño está preparado para recibir información su propia curiosidad se manifiesta en forma de preguntas; de lo contrario, si no está preparado, él mismo se retractará de sus preguntas o no las hará. Esto ocurre en todos los ámbitos de vida de un niño.

Una de las mejores etapas para decirle un niño que es adoptado, es cuando preguntas cosas como ¿de dónde vienen los bebés? o ¿cómo nacen los niños? Lejos de mentirles o evadir la respuesta, ese es un buen momento para introducir el tema de la adopción.

Puedes decirle que él no nació de ti, como sucede con otros niños que están creciendo durante nueve meses en la barriga de sus mamás. Dile que él también lo estuvo, pero en la barriga de otra mamá que no podía atenderlo, y luego le explicas cómo llegó a ti. Utiliza palabras acordes a su edad y no vaciles al hablar. Cuéntale todo mientras a la vez le haces sentir querido, deseado y esperado.

Una vez que termines haz una pausa y permite que él pregunte. No contestes sus preguntas con detalles, es mejor ser superficial y responder solo lo necesario, pero sí debes responder todas sus preguntas.

Consejos para hablar con niños adoptados

Puedes hacer un diario de vida en donde apuntar aspectos relacionados con los padres biológicos, tales como el aspecto físico, características, profesión… Puede ser una forma de ayudarle a comprender de dónde viene. No se lo entregues hasta que no sea más grande, quizá alrededor de la adolescencia sea un buen momento para hacerlo.

Cuanto antes se le dice a un hijo que es adoptado más fácil resultará el proceso para ambas partes. Todos los niños necesitan y tienen derecho a saber respecto a su origen, además es otra forma de evitar riesgos como que te escuche hablar del tema o que se entere por otros medios. Piensa que de algún modo el contarle la verdad puede ser liberador para ti y tu pareja.

Más allá de que creas que tú y tu pareja pueden ser rechazados por el niño una vez que éste sepa la verdad, o que incluso no estén preparados para hablar del tema porque de algún modo quieren protegerlo de que se sienta herido, es importante tener en cuenta que la honestidad será la clave de la confianza que él pueda depositar en ustedes en los años por venir.

A medida que pase el tiempo puede que el niño tenga más preguntas por hacer, y en realidad es normal que así sea. Si él pregunta es porque siente que puede hablar del tema, y es una buena señal que lo haga ya que, de alguna forma, significa que hay comunicación y que tiene la confianza y el lugar para hacerlo.