La población de Guatemala vive alarmada por la más de una treintena de temblores sísmicos de magnitudes entre 3,7 y 5,6 que se han registrado en el país en unas 24 horas desde la mañana de este domingo (hora local).
Aunque hasta el momento no se ha informado de que la actividad sísmica haya provocado víctimas o daños materiales, la población teme que se repita una situación como la que se produjo el pasado 7 de julio, reporta ‘El Heraldo’. Entonces un terremoto de 6,9 grados, con epicentro en el sur de México, dejó a decenas de miles de afectados y damnificados, además de causar la muerte a un niño recién nacido y heridas a 274 personas.
Un boletín emitido por el Instituto de Sismología de Guatemala tras el inicio de la serie de sismos califica esta actividad telúrica de normal. La atribuye al desplazamiento de las placas tectónicas de Cocos y del Caribe, con el que están vinculados casi todos los temblores de las zonas costeras del océano Pacífico.
No todos los temblores han sido notados por la población, afirmó el director del ente científico guatemalteco, Eddy Sánchez. Pero al menos dos de ellos, agregó, han alcanzado una magnitud de 5,6 grados (una estimación inicial les atribuyó un 5,8). Desde enero pasado el país centroamericano ha sufrido un total de 1.544 sismos.