El papa Francisco instó a gobiernos y parlamentos a hacer más para poner fin a la esclavitud moderna, pidiendo mejores leyes y políticas para impedir el tráfico de personas, proteger a las víctimas y procesar a los responsables.
Francisco también instó a los negocios a garantizar que sus cadenas de distribución estén libres de mano de obra esclava y pidió a los consumidores que se lo piensen dos veces antes de comprar bienes que podrían haber sido producidos por trabajadores menores de edad u otras víctimas de condiciones de trabajo poco dignas.
El mensaje anual de paz de Francisco, publicado el miércoles, se centró en pedir la liberación de los 35 millones de personas que se estima están esclavizados en todo el mundo.
El pontífice, que cuando era sacerdote presenció las penurias de las prostitutas y las víctimas del tráfico de personas en una humilde villa en Argentina, ha hecho de la cuestión de la esclavitud moderna un tema clave de su pontificado.
VATICANO (AP)