Por qué tengo cistitis

La cistitis es una de las infecciones urinarias más comunes, especialmente en el caso de las mujeres debido a que la uretra es mucho más corta que la de los hombres, permitiendo la entrada de bacterias con mayor facilidad.

Además el conducto entre la uretra y el ano es también más corto en el caso de las chicas, lo que permite que algunas bacterias rectales puedan entrar con mayor facilidad a esta zona. ¿Quieres saber por qué tienes cistitis? Aqui te damos las principales causas de esta condición.

Problemas con la higiene íntima
Entre un 80% y un 90% de los casos de cistitis son producidos por la bacteria gastrointestinal conocida como Escherichia Coli, que se encuentra en nuestros intestinos sin ocasionar problemas mayores, pero que cuando entra en contracto con nuestra uretra puede ser causante directa de una infección urinaria.

Debido justamente a que la uretra de la mujer es mucho más corta y recta, permitiendo fácilmente el paso de bacterias, y que la distancia entre la uretra y el ano es menor que en los hombres, resulta más fácil que el Escherichia Coli se asiente en esta zona si no se toman las medidas de higiene necesarias.

Lavar bien la zona vaginal y limpiarse siempre de adelante hacia atrás, son dos formas simples de evitar que las bacterias se asienten en la zona sin causar problemas. Aquellas mujeres con una higiene íntima inadecuada suelen presentar con mayor frecuencia esta infección.

Beber poca agua
El agua es fundamental para el correcto funcionamiento de nuestros riñones, pero además nos ayuda a evitar las infecciones en el tracto urinario porque al producir más orina seremos más capaces de eliminar a través de las micciones las posibles bacterias que se encuentren en la uretra.

Las mujeres que toman poca agua son más propensas a padecer cistitis.

Cambios hormonales
Existen etapas en la vida de la mujer donde, debido a los cambios hormonales y los niveles de concentración de la orina, resulta más fácil sufrir de cistitis. El embarazo y la menopausia son períodos comunes en los que la incidencia de infecciones urinarias aumenta. En estos casos es importante mantener una óptima ingesta de líquido y acudir a soluciones naturales, como los comprimidos de arándanos, que ayuden a contrarrestar efectivamente las molestias.

Uso del diafragma y espermicidas
El uso del diafragma y los espermicidas como métodos anticonceptivos aumentan de forma importante el riesgo de padecer cistitis, siendo uno de sus detonantes. En caso de mujeres propensas a este tipo de infecciones, la recomendación es evitar al máximo estos métodos, incluidos los preservativos con espermicida, y optar por otras soluciones como los condones libres de esta sustancia y/o la píldora.

Sistema inmunológico debilitado
Episodios de estrés elevado, enfermedades o medicamentos que puedan afectar el estado de la flora bacteriana, como es el caso de los antibióticos, u otras condiciones que perjudiquen nuestras defensas pueden hacer que seamos más propensas a padecer de cistitis.

Además aquellas personas con enfermedades como la diabetes o la esclerosis múltiple, debido a que afectan el estado de la vejiga, tienen mayor posibilidad de sufrir de esta infección urinaria.

Tipo de relaciones sexuales e higiene en el sexo
Las relaciones sexuales frecuentes pueden ser un desencadenante de la cistitis debido a la presión que se genera en la vejiga durante el acto sexual. Determinadas posiciones y la fuerza que se aplica durante la penetración pudieran influir. En el caso de mujeres que presentan cistitis después de cada relación sexual, es probable que se trate de una inflamación crónica de la uretra, en este caso se debe acudir a un ginecólogo o urólogo para evaluar las posibles soluciones.

Del mismo modo la ausencia de higiene durante el acto y la práctica de penetraciones anales y luego vaginales, llevando consigo la posible presencia de bacterias intestinales, suelen ser causantes de infecciones de orina.

¿Cuándo ir al médico?
Cuando sufrimos de cistitis se recomienda siempre ir al médico, pues lo ideal es identificar mediante una examen de orina el tipo de bacteria que afecta el tracto intestinal para aplicar el tratamiento adecuado que consiga eliminarla.

Además si en un año has sufrido de tres episodios de cistitis o presentas esta infección de forma más frecuente, será importante acudir a un especialista para determinar el origen del problema y solucionarlo.