¿Estás triste? Quizá solo te hace falta una mascota

Todas podemos sentirnos desanimadas, sin ganas de nada y tristes de vez en cuando, sobre todo si tenemos algún problema o vivimos una mala racha. Sin embargo, cuando pasa con frecuencia o esos sentimientos duran mucho tiempo, una de las cosas que podemos hacer para sentirnos mejor es cuidar a una mascota. ¡Sí, una mascota!

Los beneficios de tener este tipo de compañía son muchos y vale la pena intentarlo, no importa si te gustan los perros, los gatos o las tortugas. A continuación te platicamos por qué:

Las mascotas generan bienestar porque…

Te mantienen ocupada. Cuidar a un animalito te pone en una posición de empatía con otro ser vivo. Como debes hacerte cargo de él, enfocas tu atención en una cosa distinta al motivo de tu tristeza y mantienes ocupada tu mente con pensamientos diferentes.

Dan vida a tu hogar. Las mascotas traen movimiento a tu hogar, sobre todo si se trata de un perrito. Lo verás correr de un lado para otro en busca de tu atención: golpeará la puerta para salir a pasear, se subirá a tus piernas si tiene la oportunidad y ladrará de felicidad cuando llegues a casa.

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Los ronroneos son terapéuticos. Si lo tuyo son los gatos, también hay beneficios. Está comprobado científicamente que el ronroneo mejora algunos aspectos de la salud humana; en especial, las vibraciones de este sonido ayudan a la sanación de huesos y músculos.

A pesar de que los gatos no son muy expresivos, suelen recostarse al lado tuyo para que los acaricies o los llenes de mimos; el simple hecho de estar en contacto te hará sentir mucho mejor.

Son buenos compañeros de duelo. Las pérdidas -desde una muerte hasta terminar una relación- generan mucho dolor y desencadenan la tristeza. Una mascota es un buen compañero para este proceso, pues si necesitas soledad no lo vas a estar escuchando hablar y si necesitas compañía, la tendrás.

Te obligan a activarte. El ejercicio es una de las mejores terapias, pero si no tienes ganas de hacerlo, tu mascota te dará una razón y muchas opciones. Sacarla a pasear, bañarla, darle de comer no son actividades que requieran mucha energía, pero te mantendrán activa.

¡Qué suerte que tenemos una solución tan bonita y efectiva para cambiar nuestro estado de ánimo!