Si no subes escaleras con frecuencia, seguro que cuando lo haces puedes notar de forma casi instantánea qué partes del cuerpo se cansan con facilidad al hacerlo. Si tienes que subir y bajar escaleras repetidas veces en un día cuando no lo haces a diario, puede que al día siguiente hasta ¡tengas agujetas! Imagina lo intenso que es éste ejercicio y… ¿si lo hicieras todos los días?
Lo que puede hacer por ti subir escaleras a diario…
Prevenir la obesidad
Disminuir y prevenir la tensión alta
Prevenir afecciones cardíacas y derrame cerebral
Te ayuda a ponerte en forma
Contribuye con una adecuada función cardiovascular
Fortalecer y tonifica los músculos de las piernas
El avance de la tecnología y los adelantos en general que se han instalado en la sociedad actual pueden ser muy beneficiosos para algunas cosas; pero el utilizar ascensores, el coche, trabajar sentado al ordenador y subir por escaleras mecánicas, entre otras cosas, pueden convertirse en enemigos de nuestra salud a medio y largo plazo.
Los especialistas sanitarios concuerdan en que realizar pequeñas rutinas de actividad física a lo largo del día puede contribuir con la prevención de diversos problemas de salud.
Más motivos para subir las escaleras
Las dos terceras partes de la vida las dedicamos a estar en el lugar de trabajo, con lo cual se vuelve de vital importancia encontrar la forma de hacer ejercicio físico durante el día.
Si tienes escaleras en donde vives, trabajas o en las cercanías, solo tienes que subirlas y bajarlas durante 30 minutos de forma cotidiana para obtener beneficios para tu salud; pero si no puedes hacerlo media hora de modo continúo, también resulta efectivo hacerlo en pequeños intervalos.
Si subieras y bajaras escaleras cada día, además de aliviar la tensión que provoca el estrés, también estarías facilitando la pérdida de kilos; a lo largo de un año podrías perder casi 3 kilos.
Subir escaleras no deja de ser una actividad física, por lo que ayuda a que te sientas más activa y flexible.
Para subir escaleras a diario no tienes que pagar, no contaminas y en la mayoría de los casos ahorras tiempo en comparación con el uso del ascensor.
Si por fin te has decidido a incorporar ésta saludable práctica en tu vida, hazlo poco a poco y ve aumentando el tiempo de forma gradual para que los músculos y huesos de tus piernas no se resientan o lesionen.