Hasta un 80 por ciento de los servicios privados de salud podrían cerrar sus puertas como medida de presión; mientras que autoridades sanitarias instan a detener las acciones de protesta.
Trabajadores del sector privado de salud en Francia iniciaron este lubes la segunda semana de huelga en rechazo a las condiciones laborales vigentes y en demanda de mejoras en las condiciones salariales.
Médicos de distintas parte del país mantiene cerrados los consultorios desde el 23 del presente más y amenazan con extender el paro hasta 31 de diciembre; por medio de sindicatos de la medicina privada, cuyos cálculos estiman que entre el 40 y 80 por ciento de los especialistas dejarán de prestar servicio como medida de presión.
Por su parte autoridades del Ministerio de Salud del país galo aseguran que mantienen bajo control la situación: el servicio privado de urgencias SOS Médecins instó a casi mil médicos a poner fin a su manifestación desde este lunes.