La mayoría de los restos encontrados por habitantes de la provincia de Deir Ezzor eran de integrantes de la tribu Sheitat, asediada por la organización que opera en territorio sirio e iraquí.
Habitantes de la localidad de al Bahra, en la provincia de Deir Ezzor, al oriente de Siria descubrieron este martes una fosa común con restos de unas 70 personas asesinadas por integrantes del autodenominado Estado Islámico (EI)
La agencia de información nacional Sana citó a un testigo del descubrimiento de la fosa, quien indicó que los fallecidos pertenecían a la tribu Sheitat, que en su mayoría fueron decapitadas.
Ante la arremetida del Estado Islámico, habitantes de las villas de Deir Ezzor se alzaron contra los mercenarios.
Por su parte la villa de los Sheitat crearon el Frente de Resistencia Popular para combatir junto con el ejército sirio al EI.