13 personas que iban a bordo de una avioneta en Nueva Zelanda, incluyendo al piloto, lograron salvarse de una muerte segura después de lanzarse en paracaídas antes que la avioneta se estrellara en un lago de ese país.
La avioneta sobrevolaba el Lago Taupo al norte de Nueva Zelanda para que los ocupantes practicaran «skydiving» en el cielo, pero sufrió problemas con el motor, según informaron autoridades.
Ninguno de las personas resultó seriamente lesionado, pero el caso sigue siendo investigado, según reporta BBC News. El vocero de la Autoridad de Aviación Civil, Mike Richards, dijo que era un «milagro» que nadie hubiera muerto, y que gracias a la pericia y habilidad de los paracaidistas fue que lograron sobrevivir.
AGENCIAS