Los cambios bruscos de temperatura que han estado afectando a Jinotega, se hacen notar en la cantidad de personas que acuden a los centros de salud en busca de atención y medicamentos para aliviar la gripe, tos y fiebre.
Lisseth González, habitante de Pantasma, comentó que acudió al centro de salud Guillermo Matute para que atendieran a su hijo de 3 años, quien tenía neumonía. Tuvo que abandonar su trabajo en una finca donde cortaba café para traerlo junto con su otro hijo de 6 años, a quien le está comenzando la gripe.
Los pacientes más frecuentes son niños y ancianos. Ahí se encontraba José Castro, de 65 años, quien comentó que la tos crónica que tiene ha empeorado a partir de las «oleadas de frío» que han azotado Jinotega. En el mercado municipal varias comerciantes han llevado a sus hijos al puesto de salud recién abierto en ese centro de comercio y aseguran que las enfermedades virales «están dispersándose por todo el sector».
AGENCIAS
