Riquelme anuncio su retiro

El retiro de Juan Román Riquelme, militante obsesivo del buen trato al balón, dejó al fútbol argentino sin un clásico enganche.

Dueño de una soberbia pegada con pases de fantasía, Riquelme anunció el domingo que colgaba los botines a los 36 años, la mitad de los cuales la pasó como futbolista profesional básicamente en Boca Juniors, donde fue considerado el principal ídolo en la historia del club y al que ahora aspira a presidir. Ni la selección argentina ni los equipos de primera división cuentan con un jugador como Riquelme, quien con su andar cansino por el centro de la cancha parecía estar dormido, hasta que despertaba sin previo aviso y con sus milimétricos pases o con goles decisivos cobraba la distracción a sus rivales.

«Cumplí todos mis sueños y lo mejor era no jugar más», dijo Riquelme al anunciar su retiro en una entrevista con la emisión argentina del canal ESPN. «Cuando jugaba, algunos me decían que me retire porque no entrenaba. Hoy me siento un afortunado porque mucha gente quiere que siga jugando». Aunque se formó en Argentinos Juniors, club el que jugaba al momento de su retiro, Riquelme debutó en primera división en Boca, con quienes conquistó 11 títulos tres ciclos, incluyendo tres Copas Libertadores y la Intercontinental de 2000 en una recordada final 2-1 ante Real Madrid.

La gravitación que tuvo Riquelme en Boca es de tal magnitud que fue elegido el mayor ídolo de la historia en una encuesta que realizó el club en 2008 a través de su página oficial. Riquelme, que en Boca jugó 388 partidos y convirtió 92 goles, aventajó nada menos que a Diego Maradona, campeón con los Xeneizes en 1981. Además de jugar en Barcelona y Villarreal, con el que llegó a semifinales de la Liga de Campeones de 2006, Riquelme disputó 51 partidos con la selección mayor y marcó 17 goles. Además integró el equipo albiceleste en el Mundial de Alemania 2006 y se colgó el oro olímpico en los Juegos de Beijing 2008.

BUENOS AIRES (AP)