Pensó que había hecho el robo perfecto pero su error fue haberse metido al mismo barrio donde vive la víctima, quien al reconocerlo pidió ayuda a los pobladores desatando una persecución hasta lograr finalmente su arresto.
Se trata de Kevin Antonio Salazar Urbina, de 17 años, a quien los uniformados a la hora de requisarlo le encontraron un filoso cuchillo, el que supuestamente utiliza para cometer los asaltos a mano armada.
Aunque sus compinches lograron escapar con lo robado, Salazar Urbina, deberá identificarlos para ser arrestados, pues además la población ya los conoce. Ellos al caer la noche se ubican en una de las paradas cercanas a Plaza España, a cometer robos en sus distintas modalidades.
El jovencito que a sus cortos 17 años, ya es reconocido como amigo de lo ajeno, fue trasladado a los barrotes de la estación policial correspondiente.
Benedicto Balmaceda
