En los alrededores de la rotonda Hugo Chávez, dos personas fueron atendidas por la Dirección General de Bomberos y por el Benemérito Cuerpo de Bomberos, luego que éstos perdieran el control de la motocicleta en la que viajaban.
La confusión por parte del conductor de la moto era lo que más se podía notar, pues divagaba diciendo que la otra joven lesionada, viajaba con él y en momentos se contradecía diciendo que no la conocía.
Resultados como estos son los que deja el ingerir licor y luego conducir, que en más de una ocasión ha cobrado vidas humanas, lo que afortunadamente no sucedió en este caso.
Julio Cruz
