El Atlético de Madrid no pasó de un empate sin goles el sábado en cancha del Espanyol y cayó al cuarto puesto de la liga española tras sumar un solo triunfo en las últimas cinco fechas.
El campeón vigente se vio apeado del podio por el pujante Valencia, que tomó el tercer lugar el viernes al vencer por 2-0 al Deportivo La Coruña y beneficiarse luego del traspié del Atlético.
El equipo que dirige el argentino Diego Simeone acumula 56 puntos por la 27ma fecha del campeonato y vio prácticamente finiquitadas sus opciones de revalidar el título, además de sufrir también el acoso del quinto clasificado Sevilla con 49 unidades y un partido pendiente contra el Elche.
Barcelona lidera la clasificación con 62 puntos y juega a continuación en cancha del Eibar, mientras que Real Madrid, segundo con 61 unidades, recibe al Levante al cierre del domingo.
El Atlético, que jugó toda la segunda mitad con un hombre menos por la expulsión del central Miranda a los 45 minutos, recibe el martes al Bayer Leverkusen en octavos de final de la Liga de Campeones y tendrá la difícil misión de revertir la derrota por 1-0 en el choque de la ida. El Espanyol marcha octavo en el torneo doméstico con 33 puntos.
La jornada sabatina se completa con los cotejos Rayo Vallecano-Granada y Celta de Vigo-Athletic de Bilbao. En una primera parte poco accidentada hasta le expulsión de Miranda, el Atlético contó las mejores ocasiones, casi siempre a balón parado: Fernando Torres obligó primero a una gran intervención de Kiko Casilla en intuitivo cabezazo, Jorge Resurreción «Koke» rozó el gol en doble remate tras rechazo, y Gabi Fernández se animó con una volea centrada, a las manos del arquero.
Solo Antoine Griezmann se acercó en un contragolpe, pero cruzó en exceso. Mientras, el Espanyol merodeaba el área visitante falto de mordiente en los últimos metros, pero alcanzó el descanso en ventaja numérica gracias a la desmedida entrada de Miranda sobre Abraham González, que le valió la tarjeta roja directa y complicó el partido a los rojiblancos. Obligado a relevar a Torres por el uruguayo José Giménez para reforzar la defensa y sin el goleador Mario Mandzukic por sanción, Simeone vio cómo su equipo siguió compitiendo por el control de la pelota y, ante la inoperancia ofensiva del Espanyol, aún gozó de una gran oportunidad para ganar, cuando Raúl García se plantó ante Casilla y obligó al arquero a una gran intervención.
La falta de gol condenó al Atlético, que solo suma un tanto en sus últimos cuatro cotejos y ve alejarse la liga cuando se regresa la Champions.
BARCELONA, España (AP)
