Más de 50.000 trabajadores agrícolas están de huelga en Baja California, México, manifestándose fuertemente contra los bajos salarios, abusos y malas condiciones de trabajo. Las protestas pueden tener consecuencias en la cosecha de algunos cultivos que se importan a EE.UU., ya que se pudren en los campos.
Trabajadores agrícolas están quemando neumáticos y lanzando piedras en Baja California, un estado mexicano fronterizo agrícola que abastece con los tomates, fresas y otros productos por valor de millones de dólares a EE.UU., informa Associated Press.
La huelga, que comenzó la semana pasada, amenaza con destruir miles de puestos de trabajo, ya que los cultivos se pudren en los campos. «Si los campos continúan sin mano de obra, las cosechas se perderán, lo que afectará a todos los que dependen de esta parte de la economía», alertó la oficina del gobernador Francisco Vega, de Baja California, en un comunicado.
Los manifestantes están exigiendo atención médica, pago de horas extras, días de descanso, agua, pausas, el fin de los despidos arbitrarios y abusos -especialmente abusos sexuales- por parte de los jefes de campo. Además, piden que los salarios se eleven a cerca de 20 dólares por día: actualmente, la mayoría de los agricultores ganan entre 8 y 10 dólares por día completo de trabajo.