Desconocidos ingresaron el lunes a robar en la casa del jefe de la policía hondureña, comisionado Héctor Iván Mejía, y su esposa, la diputada Sara Medina, y les hurtaron una computadora, informó el propio funcionario.
«Los criminales han de estar decepcionados porque lo que se llevaron no era mucho (y) lo material se repone», declaró Mejía, quien reside con su esposa en la exclusiva colonia Altos de la Granja, un lugar de ingreso restringido en el sur de la capital.
Según versiones de testigos publicadas en la prensa local, los delincuentes habrían ingresado a la colonia saltando un muro perimetral y lograron llevarse una caja fuerte, la que abandonaron en un solar baldío porque no pudieron abrirla.
«No puedo tener policías en mi casa y gracias a Dios yo y mi familia estábamos en otro lugar» al momento del ingreso de los ladrones. «No voy a usar los recursos del Estado para mi beneficio personal», dijo el oficial.
El robo al jefe policial despertó comentarios en la redes sociales sobre la delincuencia en Honduras, país que tiene la tasa de homicidios más alta del mundo, 68 por cada 100.000 habitantes, según el Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional.
Tegucigalpa, Honduras | AFP
