Un hombre negro que había sufrido severas heridas en el cuello cuando fue arrestado en la ciudad estadounidense de Baltimore la semana pasada murió el domingo, desatando protestas y la promesa de una investigación del caso.
El hecho ocurrió luego de una larga serie de muertes de afroestadounidenses a manos de policías blancos en el país, que críticos atribuyen a prejuicios raciales de los agentes, a los que denuncian por un uso excesivo de fuerza letal en los procedimientos con sospechosos.
Freddie Gray, de 25 años, había sido interpelado el 12 de abril, sufriendo rotura de una vértebra durante la detención en Baltimore (Maryland, este), según la policía y medios locales.
Según el cotidiano Baltimore Sun, la policía no informó cómo resultó herido, ni la causa del arresto.
Un centenar de personas y militantes se reunieron el domingo por la noche frente a la comisaría de Baltimore, la ciudad más grande del estado de Maryland, para pedir explicaciones a la policía.
La alcaldesa de la ciudad, Stephanie Rawlings-Blake, anunció la apertura de una investigación. «Quiero que los ciudadanos sepan exactamente cómo sucedió esto y, si es necesario, me aseguraré de que las personas responsables respondan», declaró durante una conferencia de prensa.
El lunes a la mañana, interrogada por la cadena de televisión CNN, reiteró su «promesa» de aclarar este incidente. «Lo haremos en cooperación con la oficina del procurador del Estado (de Maryland) y de una forma que autorice un control exterior» agregó, precisando que también se realizará una investigación independiente.
Este hecho sucede en un contexto de una serie de muertes de afroestadounidenses desarmados, en su mayoría a manos de policías blancos, que provocaron una ola de protestas en el país, bajo acusaciones de racismo y reavivaron el debate sobre el uso excesivo de la fuerza policial.
Washington, Estados Unidos | AFP