El actor estadounidense Adam Sandler se quedó sin palabras el viernes, después de que un grupo de indígenas se retiraran de improviso de la grabación de su última película diciendo que el film los estereotipaba y trataba con racismo.
Entretanto, el gigante de producción y distribución audiovisual por streaming Netflix defendió la cinta satírica titulada The Ridiculous Six (los seis ridículos) señalando que los indígenas habían sido hipersensibles a lo que eran «obviamente» chistes. Los actores, entre ellos nativos navajos, se fueron del set esta semana con el argumento de que la película era racialmente insensible, con personajes que tenían supuestos nombres indígenas como «Aliento de Castor» y «Sin Sostén».
El vocero de Sandler se negó a comentar sobre el caso y le pidió a AFP remitirse al comunicado divulgado por Netflix, que tiene los derechos exclusivos de la producción del actor. «La película tiene ‘ridículo’ en el título por una razón: porque es ridícula», indicó el texto de Netflix. «Es una gran sátira de los westerns y de los estereotipos que estos popularizaron, con un elenco muy diverso que no sólo es parte del chiste, sino que participa en él», agrega el comunicado.
Entre los que abandonaron la producción estaba Loren Anthony, miembro tribal de la Nación Navaja, quien también es cantante y líder de la banda de metal Bloodline. «Cerca de media docena de nosotros abandonamos el set», dijo el artista.
«Hacía tiempo que me habían pedido hacer este tipo de trabajo y no me entusiasmaba», contó a la red de medios Indian Country Today. «Luego me dijeron que sería una comedia, pero que no iba a ser racista».
«Entonces accedí, pero el lunes las cosas se pusieron raras», añadió Anthony, quien no respondió a la solicitud de AFP de más comentarios.
La película, realizada por la productora de Sandler, Happy Madison, también tiene en su elenco a Nick Nolte, Steve Buscemi, Dan Aykroyd, Jon Lovitz y Vanilla Ice.
Agencias
