Las cenizas del volcán Calbuco, que había bajado su actividad el lunes después de dos violentas erupciones en cinco días, contaminaron extensas praderas y cursos de agua, dañando a unas de las zonas más ricas de Chile.
La actividad sísmica en torno al macizo, que precede a una posible nueva erupción, había bajado en las últimas horas, de acuerdo al Servicio Nacional de Geología y Minas (Sernageomín).
«Confirmado: Bajó la sismicidad del volcán Calbuco. Ahora, a esperar para saber si es tendencia», dijo el Sernageomín, este lunes en su cuenta de twitter.
Una densa neblina cubría este lunes el cráter del macizo, mientras seguían las labores de remoción de cenizas en calles y casas afectadas. Se trabajaba a toda máquina ante el pronóstico de lluvias para las próximas horas, que podrían remover las cenizas y provocar algunos aluviones secundarios, advirtieron las autoridades.
La zona se mantiene bajo alerta roja y con un radio de exclusión de 20 km alrededor del macizo, desde donde fueron evacuadas unas 5.000 personas. En algunos colegios -los que no eran usados como albergues- las clases se habían reiniciado este lunes.
Puerto Varas, Chile | AFP