Dos policías de la localidad estadounidense de Marion, Carolina del Sur, deberán pasar al menos un año de prisión por haber aplicado un mínimo de ocho descargas con pistola paralizante a una mujer con discapacidad mental sin darle tiempo a cumplir órdenes, según los fiscales federales.
Los exoficiales Eric Walters y Franklin Brown serán sentenciados por cargos federales este lunes. Los dos agentes se declararon culpables de privación de derechos bajo apariencia de legalidad en octubre de 2014, informa la revista ‘Time’.
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En abril de 2013 Walters estaba patrullando por Marion de madrugada cuando vio a Melissa Davis, de 40 años, saliendo de una casa en venta. El policía creyó que la mujer podría haber entrado ilegalmente en la casa y la paralizó con una pistola de electrochoques.
Después de que la mujer, que padece una enfermedad mental, cayera al suelo, Walters le ordenó poner las manos detrás de la espalda, y luego le aplicó descargas paralizantes cuatro veces más antes de que ella pudiera responderle. Su compañero de patrulla, Franklin Brown, la paralizó dos veces más y propuso dejar que se marchara si podía aplicarle el ‘taser’ una vez más en la frente, dijeron los fiscales.
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Los documentos de la corte revelan que esta nueva víctima de la brutalidad policial no intentó escapar ni opuso resistencia a los agentes. Los fiscales piden entre 12 y 18 meses de prisión para Eric Walters y una condena de 18 a 24 meses para Franklin Brown.