La alcaldesa de Baltimore, EEUU, Stephanie Rawlings-Blake, dice que las escuelas no tienen otra opción más que cerrar dado que muchos profesores no acudieron a trabajar debido a los disturbios, los cuales se produjeron tras la muerte de Freddie Gray, quien falleció estando bajo custodia policial.
Gray fue sepultado el lunes.
Además, la funcionaria se retractó de las declaraciones que hizo sobre los «rufianes» que tratan de acabar con la ciudad.
«Quería decir algo que me saliera del corazón… No tenemos rufianes en Baltimore. Algunas veces mi intérprete enojado saca lo mejor de mí», dijo señalando hacia su cabeza. «Tenemos a muchos niños que se están comportando mal, gente de nuestra comunidad que está actuando mal».
Líderes religiosos dijeron que 14 iglesias abrieron el martes para los niños, donde serán alimentados, dado que muchos de ellos dependen de los almuerzos que les dan en las escuelas.
EEUU -AP