El gobernador de Puerto Rico, Alejandro García Padilla, autorizó sorpresivamente por decreto el uso de los derivados de la marihuana con fines medicinales, luego de un infructuoso debate legislativo, aunque su implementación tomará un tiempo.
García Padilla firmó el decreto la noche del domingo e instruyó a la secretaria de Salud, Ana Ríus Armendáriz, que concrete la medida cuyos detalles aún no han sido divulgados.
Ríus Armendáriz dijo este lunes que una empresa podría empezar en agosto a preparar los medicamentos derivados del cannabis para ser usados en este país del Caribe de 3,5 millones de habitantes.
El estado libre asociado norteamericano se une así a la corriente en Estados Unidos, donde ya 24 de los 50 estados, más la capital Washington, permiten el uso medicinal de la marihuana.
Ríus Armendáriz reconoció que aún debe reglamentarse cómo se dispensará el cannabis, qué empresa tendría derecho a producirla y entregarla al paciente y cuáles diagnósticos podrían ser tratados con los productos.
Pero de todos modos, el uso de la medicina será rígidamente controlado y la marihuana no se fumará, sino que será usada de modo oral en aceites o té.
San Juan, Puerto Rico | AFP