con nueve copas de europa repartidas entre ambos, barcelona y bayern munich bañan en plata el cartel de semifinales que les enfrenta el miércoles en el choque de ida en el camp nou. las letras doradas las ponen lionel messi y pep guardiola, el ex entrenador barcelonista que regresa a su casa para medir fuerzas con su más brillante discípulo.
el cargado palmarés de ambas entidades centenarias, enfrentadas también históricamente en cuestiones estilísticas, y el marco de una penúltima ronda continental, bastan por sí solos para resaltar la trascendencia del cruce; pero la tensión emocional añadida responde a los dos indiscutibles protagonistas de la cita, que se reencontrarán por vez primera en partido oficial desde que guardiola decidió dejar el barsa en 2012, cerrando una brillante época en que recolectó 14 títulos de 19 posibles.
obviando el presente curso, en que messi totaliza 51 dianas y 26 asistencias en todas las competiciones y se exhibe como futbolista total, la mejor versión del astro argentino surgió bajo la dirección de guardiola, quien también cuenta tres títulos europeos con el barsa: dos como entrenador, otro como futbolista.
el bayern alcanza la cita con los deberes hechos, pues ganó su tercera liga consecutiva con cuatro partidos pendientes; aunque fue incapaz de conquistar la copa, cayendo en semifinales ante el borussia dortmund.
las ausencias acechan a guardiola, pues el creativo franck ribery y el central david alaba, claves en la construcción, tampoco estarán disponibles. y la derrota liguera del sábado, 2-0 frente al bayer leverskusen, dejó mal sabor de boca.
el barsa tan solo lamenta la baja del defensor jeremy mathieu y se siente fuerte, física y mentalmente, para retar al único equipo capaz de doblegarle en las últimas 32 citas europeas en su estadio, aunque en aquella ocasión no jugó messi.
el bagaje emocional ya es otra cosa, en una entidad acostumbrada a mirarse el ombligo y a la que parece incomodar el regreso de su técnico más exitoso con el club que mayor herida dejó en tiempos recientes.
«nos conocen bien. son intensos en defensa y tienen recursos en ataque, pero a nuestros puntas es difícil pararlos», subrayó luis enrique.
como antídoto, como siempre, aparece messi, presente en la previa y esperado en la cancha, con el prestigioso cruce barsa-bayern de inmejorable reclamo.
barcelona, españa (ap)