Las autoridades de Estados Unidos informaron el viernes la detención de un ciudadano hondureño en el sur de México que transportaba a 13 personas originarias de Bangladesh y Paquistán en dirección a ese país.
La detención, que tuvo lugar el 6 de mayo en el municipio de Tapachula en el estado de Chiapas, fronterizo con Guatemala, fue realizada en colaboración con el Departamento de Seguridad Interna de Estados Unidos, según un comunicado hecho público por la embajada de ese país en México.
El hondureño, identificado como Franklin Santa María Fajardo, de 29 años, manejaba una camioneta a gran velocidad. Cuando agentes mexicanos detuvieron el vehículo «los pasajeros actuaron de manera sospechosa, bajando la cabeza para evitar ser detectados». Seis adultos y un menor de edad son de Bangladesh y los otros seis de Pakistán. Ninguno tenía permiso de estancia en México y fueron procesados para su deportación. Fajardo sigue detenido.
El sur de México, especialmente el estado de Chiapas, ha sido desde hace años un pasillo por el que migrantes centroamericanos se dirigen a Estados Unidos. Allí comienza su recorrido en un tren de carga conocido como «La Bestia» que recorre todo el país y al que se han subido decenas de miles de personas que buscaban su futuro en el país del norte.
Los migrantes llegan a pagar de 5.000 a 10.000 dólares por persona para realizar el viaje de miles de kilómetros. Eso cubre todo, desde hoteles hasta pagos en trenes, sobornos a las autoridades y cuotas a carteles. Pero en ocasiones grupos como Los Zetas, que operan en el norte de México, pueden exigir tanto como 5.000 dólares extra bajo la amenaza de ejecutar a los migrantes.
MEXICO (AP)