Las autoridades de California, oeste de EEUU, mantenían este miércoles sus esfuerzos por contener un derrame de petróleo tras la ruptura de un oleoducto, que ha vertido cientos de miles de litros al océano Pacífico.
Una portavoz de la Guardia Costera de Estados Unidos, Jennifer Williams, señaló que la mancha negra, detectada el martes, afecta ya 14 kilómetros de la costa de Santa Bárbara, una localidad situada al noroeste de Los Ángeles.
Al menos 80.000 litros de petróleo cayeron al mar, según informaron medios locales, aunque las autoridades aseguraron que todavía están evaluando la envergadura del accidente.
Las playas de Santa Bárbara se estaban preparando para recibir a miles de turistas el próximo fin de semana, aprovechando que el lunes es festivo en Estados Unidos.
En Refugio Beach, una de las más concurridas, cientos de personas se esforzaban por limpiarla con rastrillos y otros utensilios.
La fuga proviene de un oleoducto de la compañía Plains All America Pipeline, quien explicó que el vertido llegó al mar por un desagüe que ha sido bloqueado.
Los Angeles, Estados Unidos | AFP