La Guardia Civil ha detenido en Valladolid y Sevilla a cinco personas de dos clanes familiares por vender y explotar a una menor de 11 años. Los padres de la niña, ambos rumanos y residentes en Sevilla, la vendieron hace un año por 17.000 euros a otra familia, también de origen rumano y afincada en Valladolid, para que se casara en Rumanía.
Los cinco detenidos tienen entre 19 y 42 años y se les acusa de trata de seres humanos, malos tratos, hurto, abuso sexual, agresión sexual y explotación laboral. Tras la boda en Rumanía, la menor fue trasladada a Valladolid, donde recibía insultos, amenazas y agresiones «constantes». También la obligaban a mantener relaciones sexuales con uno de los arrestados, de 19 años, y a trabajar recogiendo uva y patatas, en largas jornadas laborales y sin cobrar nada.
La menor había llamado a su madre pidiendo ayuda, por lo que la familia intentó que regresara a Sevilla. El clan de Valladolid exigió para ello 10.000 euros e incluso llegó a arrancar de las orejas, «de forma muy violenta» explica la Guardia Civil, los pendientes que llevaba puestos para compensar esa deuda. Cuando supieron que la policía buscaba a la niña, la enviaron en autobús a Sevilla de vuelta con su familia.