Unas 300 personas, entre inmigrantes, profesores y representantes de entidades sociales, se manifestaron el martes delante del Ayuntamiento de Nueva York para pedir al alcalde, Bill de Blasio, que no dé paso al recorte que contempla el presupuesto de este año y que eliminaría unos 5 millones de dólares destinados a clases para inmigrantes.
Los manifestantes dijeron que si el recorte se aprueba, a partir del 1 de julio, cuando entre en vigor el nuevo presupuesto, se quedarían sin clase unos 4.100 estudiantes.
El programa, que puso en marcha el anterior alcalde de la ciudad, Michael Bloomberg, se imparte en centros de la universidad pública de la ciudad y en casi treinta centros comunitarios.
«Estamos aquí porque necesitamos más oportunidades y porque posiblemente no quieren ayudarnos más. Hemos venido a decir que sí necesitamos esta ayuda», dijo a The Associated Press el joven salvadoreño Saúl Vázquez, uno de los manifestantes.
Vázquez, que dejó El Salvador hace cuatro años, explicó que trabaja en un restaurante y que ahora está tomando clases de inglés en el centro comunitario del Bronx llamado SoBRo.
«Todos tenemos sueños. Yo quiero un futuro mejor para ayudar a la familia y por esto necesito aprender inglés, porque necesito un mejor trabajo. Si ellos (el Ayuntamiento) cortan esto, no tendríamos beneficios y lo sueños de muchos quedarían abajo», dijo Vázquez.
NUEVA YORK (AP)