Un turista estadounidense de 18 años fue rescatado en alta mar luego de que la corriente lo arrastró durante 16 horas en el Atlántico de Honduras, informaron las autoridades el viernes.
Aaron Rose, de Texas, había salido la tarde del miércoles a dar un paseo en kayak en Roatán, unos 500 kilómetros al norte de Tegucigalpa, cuando el viento lo desvió mar adentro. Un helicóptero de Estados Unidos de la base aérea de Palmelora lo rescató la mañana del jueves a 18 millas de la costa luego de ser avistado por un piloto hondureño de un avión privado, según la página de internet de la embajada estadounidense.
«Un rescatista estadounidense bajó del helicóptero, sujetó con arneses a Aaron a un cable y lo subió», dijo a The Associated Press el jefe regional en Islas de la Bahía de la Comisión Permanente de Contingencias, Andy López. Islas de la Bahía es un archipiélago al norte de Honduras, que es azotado desde hace cinco días por fuertes vientos y lluvias.
«El muchacho fue hospitalizado de inmediato y está en buenas condiciones de salud», agregó.
López dijo que el viento arrastró de la costa al joven quien inicialmente usó sin éxito el remo para avanzar. Nueve horas después de abandonar la playa, Rose soltó el remo y cayó al agua. Sin embargo, se aferró por otras siete horas a la pequeña embarcación hasta que fue visto desde el aire. El oleaje era en ese momento superior a los tres metros.
En la búsqueda participaron militares hondureños y estadounidenses y empresarios del lugar.
El adolescente había llegado a Roatán en un viaje misionero con su familia.
López aseguró que «las condiciones físicas y espirituales salvaron al muchacho, lo ayudaron a sobrevivir».
En 15 años han muerto en Roatán en similares circunstancias más de 20 personas al viajar en kayak o lanchas pequeñas.
TEGUCIGALPA, Honduras (AP)
