La selección de Chile enfrentaba el miércoles la perspectiva de que quedarse sin su buque insignia Arturo Vidal en plena Copa América luego de que el volante de Juventus fuese detenido por manejar en estado de ebriedad.
Vidal se estrelló con su Ferrari en una autopista al sur de la capital y sufrió heridas leves la noche del martes, según la policía. Los medios de prensa chilenos coinciden en que regresaba de un casino, al que habría ido con su esposa un día después de que Chile empatase 3-3 con México y viese postergada su clasificación a la segunda ronda.
Un coronel de la policía, Ricardo González, confirmó que había sufrido heridas leves. Vidal pasó la noche detenido y llegó a un juzgado el miércoles por la mañana.
«El conductor del vehículo rojo estaba bajo la influencia del alcohol», dijo González, en alusión al Ferrari de Vidal.
González indicó que la acompañante de Vidal sufrió lesiones «de mediana gravedad».
El accidente pudo haber tenido consecuencias más graves, ya que el vehículo deportivo terminó al borde de una zanja, con el costado izquierdo destrozado y las bolsas de aire detonadas, y otro automóvil quedó de costado.
«Lamentablemente me vi involucrado en un accidente de tránsito. Por suerte estamos todos bien y tranquilos. Gracias x la preocupación!», escribió Vidal en la madrugada del miércoles en su cuenta de Twitter.
Es previsible que Vidal recupere la libertad luego de ver a un juez, pero no está claro qué decidirán el técnico de Chile Jorge Sampaoli y las autoridades del fútbol chileno. Sampaoli se reuniría el miércoles con el presidente de la federación chilena Sergio Jadue para decidir qué medidas tomar.
