La selección argentina de fútbol llegó a Santiago para preparar la final de la Copa América del fin de semana ante el anfitrión Chile, tranquila tras la goleada del martes y con la duda de si el defensor Ezequiel Garay podrá jugar la definición del torneo.
Argentina clasificó a la final de la Copa América tras golear 6-1 a Paraguay en una de las semifinales, y el sábado chocará con Chile, que por su parte le ganó 2-1 a Perú.
La «albiceleste» entrenó la mañana del miércoles en Concepción, en una práctica en la que los futbolistas que jugaron ante Paraguay realizaron trabajos regenerativos, mientras que los que no estuvieron en el partido hicieron fútbol en espacios reducidos.
Garay no se presentó al entrenamiento ya que sigue con gastroenterocolitis, el problema que lo marginó del choque contra la «albirroja», y es duda para la final.
El martes, su lugar fue ocupado por el defensor del Manchester City Martín Demichelis.
Luego de la práctica, el delantero Carlos Tevez se quedó exigiendo a los arqueros.
SANTIAGO (Reuters)
