María Audenete nació el siete de mayo de 1981 en Ceará, al nordeste de Brasil. A sus 30 años usa pañales, no habla ni camina. Desde los nueve meses no ha crecido nada.
Los médicos de la Universidad de Ceará creen que María sufre una deficiencia severa de la glándula tiroidea y por eso su cuerpo no se ha desarrollado ni física ni mentalmente. María nació en el seno de una familia muy humilde. Su padre y su madrastra la cuidan desde que su madre falleció hace 13 años. Si su familia hubiera tenido recursos, María habría podido recibir un tratamiento desde bebé y hoy sería una joven normal.
La universidad se ha comprometido a someterla a un tratamiento, gratuito, para que pueda ser algo más independiente, al menos, para caminar o comer.