Un niño de dos años de edad ha estado a punto de fallecer trágicamente en el mercado de Anhui, situado al este de China.
Según informan los medios locales, acudía a comprar con sus padres como hacían habitualmente, cuando en un descuido el niño, al que le picó la curiosidad, decidió meter la mano en una picadora de carne en la que se quedó atrapado.
El mecanismo sostuvo durante unos minutos el brazo del niño, que estuvo retenido con visibles gestos de dolor, tal y como aseguraban los testigos presenciales.
Afortunadamente, los bomberos se presentaron en el mercado y, aunque con dificultad, pudieron sacar el brazo del menor.
El pequeño tuvo que ser trasladado al hospital para que pudieran ser revisadas todas y cada una de las numerosas heridas que había provocado la picadora de carne.
Después de una serie de radiografías y evaluaciones, el menor fue dado de alta aunque se recupera en su casa de una leve lesión en su muñeca.