Barcelona, que trata de igualar la hazaña lograda bajo Pep Guardiola al ganar seis títulos en un mismo año, echará de menos a Neymar al enfrentar el martes a Sevilla por la Supercopa europea, el cuarto trofeo que intenta alzar en el 2015.
El club español ya conquistó la liga y la copa de España y la Liga de Campeones. Y de aquí al fin del año irá por las dos Supercopas, la europea y la española, y por el mundial de clubes.
«No es tan fácil ganar seis títulos. Pocos equipos lo han hecho. Mañana tenemos la primera piedra, contra un rival que nos conoce muy bien, con un grandísimo entrenador», afirmó el capitán Andrés Iniesta, aludiendo al técnico sevillano Unai Emery. «Tenemos muchísima ilusión de hacer otra vez esos seis títulos».
El choque es el primer partido oficial de los dos clubes en la nueva temporada del 2015/16.
«Cuando ganas el triplete, la mente ya se va a la opción de las Supercopas y el Mundial de Clubes. Volvemos a estar encantados por esta situación, pero sabemos que no va a ser nada fácil porque muy pocos equipos lo han hecho», acotó
Neymar fue descartado por dos semanas el domingo tras contraer paperas, a pesar de que el club había dicho que se había vacunado contra ellas.
«Es una pena» que el brasileño no pueda jugar por «la energía y la alegría» que aporta, dijo su compatriota Dani Alves.
La presencia de Lionel Messi, no obstante, «es garantía de éxito casi seguro», apuntó Iniesta, aludiendo al gran año que está teniendo el argentino, firme candidato a su quinto Balón de Oro.
Tampoco estarán el lateral izquierdo Jordi Alba, que se recupera de una lesión en un muslo, ni Aleix Vidal y Arda Turan, dos flamantes adquisiciones, no podrán jugar hasta enero debido a una sanción que tiene Barcelona. Pero viajaron con el equipo, lo mismo que Pedro Rodríguez, a pesar de que se cree que en cualquier momento cambiará de club.
Pedro, el eterno suplente de lujo, podría salir de titular en lugar de Neymar.
Barcelona perdió partidos de pretemporada con Manchester United, Chelsea y Fiorentina jugando sin Neymar y sin Messi, quienes se incorporaron a los entrenamientos más tarde por haber jugado la Copa América. Con ambos de vuelta en el equipo, golearon 3-0 a Roma y volvió la fiesta.
Sevilla, que perdió la Supercopa europea del año pasado ante Real Madrid, vio partir a figuras importantes, incluido el colombiano Carlos Bacca, autor de dos goles en la victoria 3-2 sobre Dnipro Dnipropetrovsk en la final de la Liga Europa. Entre las caras nuevas está Yevhen Konplyanka, quien lució la camiseta de Dnipro en ese encuentro.
El volante sevillano Jorge Andújar, «Coke», niega que Barcelona sea favorito.
«La final está al 50 por ciento. En una final puede pasar cualquier cosa, y creo que el partido puede estar igualado. Es un rival muy complicado, pero también nosotros tenemos nuestras armas», manifestó.
«En nuestra cabeza sólo pasa ganar. Para eso llevamos entrenando mes y medio», añadió.
La Supercopa, que enfrenta al ganador de la Liga de Campeones con el de la Liga Europa, es el primer trofeo europeo que se dirime en Georgia, donde se espera un clima cálido y seco a pesar de que el partido empieza a las 22.30.
En la Supercopa española Barcelona enfrentará al Athletic de Bilbao el 14 y 17 de agosto. El mundial de clubes se jugará en diciembre en Japón. Ya se clasificaron Barcelona, River Plate (Argentina), América (México) y Aucland City (Nueva Zelanda).
BILISI, Georgia (AP)