Gregorio López es una de los 40 nicaragüenses que fue deportado de los Estados Unidos por condiciones migratoria irregular. Este miércoles ingresaron al Nicaragua a través de un vuelo privado que les garantiza seguridad y condiciones humanas de las cuales fueron privados al momento de cruzar en busca del sueno americano.
Todos pensamos en un sueño, de llegar a los Estados Unidos y vivir una buena vida cuando otro compañero nos platica que es bonito vivir en los Estados pero no saben los riesgos que uno corre al salir de su país, afirma López.
El consulado nicaragüense brinda a acompañamiento a los compatriotas deportados, y asistencia para que se incorporen a los programas que impulsa el gobierno.
Un trabajo coordinado que se realiza con el Ministerio de la Salud para que les da atención medica a quienes requieran. Le damos un estipendio económico para que ellos puedan desplazarse a sus lugares de origen.
También le llevamos una merienda una refracción llegan a su destino, señala Yuri Orozco, directora consular de Nicaragua. Del 2007 a la fecha se han realizado 124 vuelos privados, asistiendo 9340 nicaragüenses, 7640 de ellos varones a quienes se les ha habilitado un pasaporte provisional para retornen al país.