Brendan Rodgers fue despedido el domingo como técnico del Liverpool, pagando los platos rotos por los malos resultados de un club que lleva más de un cuarto de siglo desde que conquistó su último título de liga en el fútbol inglés.
El consorcio estadounidense Fenway Sports Group, dueño del club, tomó la decisión el mismo día del empate 1-1 en casa de su rival de patio Everton. El despido de Rodgers fue anunciado tres horas después del partido.
«Todos vivimos algunos momentos maravillosos con Brendan como entrenador y estamos confiados que tendrá una larga carrera en el fútbol», dijeron los dueños en un comunicado. «Aunque esta ha sido una decisión difícil de tomar, nos permite tener la mejor oportunidad de mejorar en la cancha».
Liverpool informó que la búsqueda del sustituto de Rodgers ya está en marca. Las conjeturas de la prensa apuntan a Juergen Klopp, quien no está atado con nadie tras haber dejado la dirección del club alemán Borussia Dortmund al término de la pasada temporada.
Debido a la fecha FIFA, a Liverpool no le toca jugar en la Liga Premier hasta el 17 de octubre, en la cancha de Tottenham, así que tienen dos semanas para contratar a un nuevo timonel.
Liverpool marcha décimo en la Premier, con tres victorias en sus primeros ocho partidos.
Rodgers asumió en junio de 2012 y reflotó a un club que había quedado en un segundo plano por sus penurias financieras
Con el goleador uruguayo Luis Suárez remeciendo las redes con frecuencia, Liverpool acarició el título de la Premier en la temporada 2013-14. Pero acabó en el segundo puesto de la tabla, a dos puntos del Manchester City.
Pero el equipo entró en declive cuando Suárez fichó con Barcelona en julio del año pasado. La baja por lesión del delantero Daniel Sturridge también conspiró en una merma goleadora.
LONDRES (AP)
