El acusado la golpeó «repetidamente» por todo el cuerpo a su novia, la roció con gasolina y la prendió fuego. Al ver que todavía se encontraba viva, la trasladó a una clínica cercana en su propio vehículo.
La Justicia española condenó a 24 años y medio de prisión a un hombre español nacido en Venezuela por quemar viva a su novia, que murió días después de la agresión.
Según informaron hoy medios españoles, la Audiencia Nacional española consideró al acusado culpable de un delito de asesinato con agravante de parentesco y de malos tratos habituales. El tribunal le reclamó, además, que indemnice a los padres de la víctima con 300,000 euros (336,000 dólares).
El condenado fue detenido en 2011 en Santiago de Compostela, en el noroeste de España, después de darse la fuga y salir de Venezuela.
Los hechos tuvieron lugar dos años antes en la ciudad de El Tigre, en el estado venezolano de Anzóategui. Allí, en el apartamento de la víctima, de 26 años y nacionalidad venezolana, se produjo una fuerte discusión cuando ella quiso romper la relación por los malos tratos que sufría.
Según la prensa española, el acusado la golpeó «repetidamente» por todo el cuerpo, la roció con gasolina y la prendió fuego. Al ver que todavía se encontraba viva, la trasladó a una clínica cercana en su propio vehículo y dijo no conocerla.
El acusado fue trasladado a dependencias de la Policía, donde finalmente fue puesto en libertad. Tras borrar «huellas y vestigios incriminatorios» del apartamento de la víctima, se dio a la fuga y abandonó el país.
La Justicia española abrió un procedimiento judicial por este caso al no prosperar la extradición del acusado a Venezuela, que reclamó su entrega para juzgarle en el país sudamericano.
La Audiencia Nacional puso como condición la entrega por parte de Venezuela de etarras supuestamente afincados en ese país y reclamados por España, como Arturo Cubillas o Iñaki de Juana Chaos.
Agencias