La banda californiana de heavy metal Megadeth ha sido la última víctima de la censura china pues, según la web de tendencias The Beijinger, se habría prohibido al grupo tocar algunas de sus canciones más famosas y acortaron su concierto de anoche en Pekín a apenas una hora.
El conjunto de «thrash metal» acabó de forma abrupta la actuación en el MasterCard Center de Pekín, con la sospecha de que las autoridades forzaron a acortarlo o interrumpirlo, indica la citada web.
Además, una de las canciones más conocidas del grupo heavy, «Skin Of My Teeth», se convirtió en el concierto en una pieza instrumental, sin su polémica letra.
Otros éxitos del repertorio de Megadeth, «Holy Wars/The Punishment Due» y «Angry Again» también estuvieron sospechosamente ausentes de la actuación pequinesa.
El líder de la banda Dave Mustaine se despidió de forma abrupta del público, diciendo: «gracias a todos por marcharos, para que podamos volver y tocar otra vez», aunque posteriormente no hizo declaraciones ni confirmó si hubo o no censura.
Según The Beijinger, los asistentes mostraron extrañeza por la brevedad de un concierto por el que habían pagado entre 680 y 1.280 yuanes (entre 100 y 200 dólares), aunque se marcharon del pabellón sin incidentes.
Los californianos tienen previsto un nuevo concierto en China mañana y posteriormente viajarán a Japón.
Otro célebre grupo de «thrash metal», Metallica, actuó en China en 2013 y sus miembros reconocieron que antes de hacerlo tuvieron que entregar la lista de canciones que iban a tocar a las autoridades, que les prohibieron interpretar algunos de sus éxitos, como «Master Of Puppets».
El pasado septiembre Bon Jovi, otro clásico del rock duro, tenía contratados dos conciertos en Pekín y Shanghái, pero pocos días antes fueron cancelados por las autoridades chinas, que no dieron explicaciones sobre las causas.
Los medios especularon que a Pekín no le gustó que el conjunto liderado por Jon Bon Jovi incluyera imágenes de la masacre de Tiananmen en un vídeo musical de 2009, o que se proyectaran grandes imágenes del Dalai Lama, un enemigo de la patria para el régimen comunista, en un concierto de la banda en 2011.
Pekín, (EFE).