Ser empelado de Google no es sinónimo de una vida de lujo y confort, al menos no para un joven ingeniero que labora en la compañía desde el mes de mayo y cuya historia ha llamado la atención en las redes sociales.
Mi nombre es Brandon y trabajo en la Bahía de San Francisco como Ingeniero de Software. He tomado la decisión de vivir en el contenedor de una camioneta de 11 m². Voy a utilizar este blog para registrar mis experiencias, señala la presentación de la bitácora virtual de Brandon, un ingeniero de 23 años que labora en Google.
Lejos de suponer que se trata de una simple extravagancia, la decisión de este joven de vivir en una furgoneta se debe básicamente a motivos económicos, ya que su intención es ahorrar todo lo posible para pagar el crédito educativo que pidió para estudiar.
Según narra el portal Business Insider, Brandon que prefiere mantener su rostro y apellidos ocultos- se dio cuenta que estaba pagando una cantidad exorbitante de dinero por un departamento en el que paraba muy poco. Así que decidió tomar una alocada decisión y se compró una vieja furgoneta y la convirtió en su hogar.
El joven ingeniero habilitó el contenedor de su vehículo y lo amobló de forma sencilla. «Tengo una cama, un armario y un perchero que me hice para colgar la ropa», manifestó. La luz no es un privilegio del que goce y tan solo utiliza una lámpara y una batería con la que carga su smartphone por las noches.
Al tener estacionado su vehículo en el parking de su trabajo no gasta tampoco en transporte y tiene la tranquilidad de vivir en una zona constantemente vigilada. De hecho, Brandon conoce al personal de seguridad que trabaja en Google, con los que ha desarrollado una gran amistad.