Un estudio realizado por el Servicio Geológico de Estados Unidos asegura que un temblor de magnitud 6 o superior sucederá en Los Ángeles, California, antes del 2019, con una probabilidad del 99,9%.
Además menciona que la falla de San Andrés podría provocar un terremoto aún mayor, al cual se le conoce como el Big One, y este sucederá en menos de 30 años con una magnitud de 8 o más en la escala Richter.
El estudio de los geólogos estadounidenses es respaldado por la NASA, citó el diario español Antena3. Los investigadores utilizaron alta tecnología para respaldar su teoría, la geofísica, Andrea Donnella, es quien dirigió el análisis y utilizó datos del GPS y radar aerotransportado para medir los cambios en la superficie de la corteza terrestre causados por un pequeño temblor que se produjo en La Habra, norte de Los Ángeles, el pasado 28 de marzo de 2014.
Los expertos estiman que las probabilidades de que California experimente un temblor de tal magnitud es de un 99,9 por ciento, y que éste se producirá en menos de tres años.
«Tenemos la suerte de que la actividad sísmica en California ha sido relativamente baja en el último siglo. Pero sabemos que las fuerzas tectónicas se están ajustando continuamente, por lo que grandes terremotos son inevitables», ha señalado a Antena3el director del Centro de Terremotos del Sur de California y co-autor del estudio, Tom Jordan.
Los científicos concluyen señalando que lo que puede ocurrir en la falla de San Andrés es «una amenaza real» también en otras fallas y que, en muchos casos, podría ser causa de tsunamis.
Agencias