Sabemos que la imagen que encabeza este artículo no te es desconocida. Esos rostros impactantes donde las miradas quedan casi licuadas por una masa negra tiñendo rostros infantiles, es algo muy común en el mundo del cine.
Ahora bien, el misterio de los niños de ojos negros es una de las leyendas urbanas más famosas en los últimos tiempos. Empezó en los años 90 y en especial en el mundo de las redes sociales y los foros de internet. Eran niños, niños de no más de 12 o 13 años que aparecían con una mirada completamente opaca, de un negro profundo y antinatural.
Niños de ojos negros, encuentros llenos de inquietud
Para ponernos un poco en contexto empezaremos dándote el testimonio de una pareja que a mediados de los 90 experimentó un encuentro con estos niños misteriosos y que apareció publicado en el Huffington Post. No tiene desperdicio:
El sábado 13 de septiembre, mi esposa y yo estábamos paseando por Cannock Chase (Reino Unido) con nuestro perro. Nos adentramos en el bosque porque la tarde era tranquila e invitaba a un instante de paz y relajación. Fue entonces cuando escuchamos las risas de una niña.
La niña no medía más de un metro y estaba delante de nosotros, cuando de pronto, se giró. Quedamos aterrados, porque su mirada carecía de vida, era una masa negra que cubría sus ojos por completo. Era aterrador, en especial también por su cabeza, inclinada hacia un lado, como si la hubieran colgado.
Ella nos miró durante unos minutos antes de huir entre los árboles. Mi esposa quería que la siguiera, pero yo ni siquiera me atrevía a moverme.
Esta no ha sido la única experiencia con estos niños. Suelen aparecer en escenarios tranquilos y con poca gente. Pueden hacer acto de presencia en parques, bosques e incluso en las inmediaciones de las casas. Otro testimonio similar fue el de Kerrie Kisner, una universitaria de 20 años, quien volviendo una tarde hacia su casa en Carolina del Norte (Estados Unidos) quiso detenerse en un centro comercial llamado El Triángulo.
Se encontró con un niño. De lejos parecía normal, pero como era casi de noche apenas podía distinguirlo. Hasta que lo tuvo cara a cara. Tenía el cabello completamente negro, una piel muy pálida y parecía estar manteniendo una conversación con alguien. Y de pronto, se giró Sus ojos eran como el ala de un cuervo, y de una opacidad tan profunda donde no existía ni un ápice de vida. Le ofreció una sensación de frialdad profunda.
Para muchos son demonios. Porque lo que les provoca al sentir sus cercanías es una sensación de desolación absoluta. Como quien se acerca al borde de un precipicio, como quien recibe el aliento de una casa vieja cargada de polvo, vejez y tiempo estancado. No es algo bueno, y eso es un aspecto que todos aquellos que se han encontrado con los niños de ojos negros, saben de forma instintiva.
Hay quien afirma que serían humanoides, otros almas en pena que quedan suspendidas en este mundo Sea como sea, en todos los espacios de Internet que tratan este tema advierten de una serie de recomendaciones que deberíamos seguir si nos encontramos con ellos:
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No hables con ellos. No mantengas ningún tipo de interacción.
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Nunca les invites a pasar a tu casa (una recomendación influenciada por los amantes de los vampiros, sin duda)
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Cuando te encuentres con ellos, ignóralos. No les des importancia, haz como si no los hubieras visto, como si fueran solo un viento frío del que protegerte y al cual, evitar.
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No dejes tu mirada suspendida en la de estos niños. Desvía el rostro de inmediato y, simplemente, pasa de largo.
Leyendas urbanas que llevan entre nosotros más de 20 años y que no dejan de causar expectación. No obstante, no hay nada real, no hay nada probado. Solo encuentros casuales con lo extraño que han llegado a la prensa y que hemos querido compartir contigo.
Agencias
