Ramírez, de 31 años, firmó en noviembre pasado un contrato por cuatro años y 88 millones de dólares, y se mudó del campocorto al jardín izquierdo, donde tuvo algunos problemas. Bateó para .249 con 19 jonrones y 53 producidas, en una campaña que concluyó prematuramente en agosto, por un dolor en el hombro derecho.
Dombrowski dijo que el club «no le ordenó que bajara de peso, de ningún modo». Pero los Medias Rojas buscan que Ramírez sea «más atlético, más concentrado en batear dobles y en aprovechar todo el jardín para remolcar carreras, y no tanto en sacar la pelota del parque para llegar a 40 jonrones».
El dirigente dijo que fue él quien solicitó la reunión, que duró unos 45 minutos.
«Sólo quería cerciorarme de que todos estábamos en la misma sintonía antes del invierno», explicó Dombrowski. «Le dije que contábamos con él para grandes cosas el año próximo. Contamos con él para que sea nuestro primera base. Le pregunté si él pensaba que podía jugar en primera, y él me contestó, ‘puedo jugar en el campocorto, en segunda, tercera y en primera’. Pareció cómodo con eso».
Ramírez no sentiría ya dolor en el hombro, de acuerdo con Dombrowski. Dan Dyrek, jefe de servicios de medicina deportiva, se reunió con el consultor de acondicionamiento físico de Ramírez, con quien se determinó que el pelotero entrene junto con su compatriota, el bateador designado David Ortiz, en República Dominicana.
BOCA RATON, Florida – AP
