Celfa Leonor Sandino Mendoza, madre de dos hijos de 2 y 12 años, estaba en su vivienda cuando fue abordada por un sujeto aún no identificado quien le manifestó que le ayudaría con una plancha más cómoda para hacer tortillas, pero para ello debía entregarle un tanque de gas. La señora confiada envió a su hijo para que acompañara al señor sin saber que era un tamal.
Mendoza ante la necesidad confió ciegamente en este hombre, provocando que pasara por dos horas de sufrimiento que jamás olvidará en su vida, al darse cuenta que había sido engañada y que se trataba de un delincuente.
Por fortuna la mujer logró volver a ver a su hijo quien astutamente se bajó del autobús en el que iba con el hombre, esto en las inmediaciones del Hotel Estrella.
Este suceso activó a todos los habitantes del sector de la Colonia Nicarao, quienes le explicaron a las autoridades policiales que este hombre ya había andado rondando las viviendas buscando víctimas.
Amanda Pérez