Una oleada de ataques aéreos a la ciudad siria de Raqqa, cuartel general del grupo extremista Estado Islámico y blanco de una campaña militar internacional dejó al menos ocho muertos. Entre las víctimas hay cinco niños, dijeron grupos opositores sirios el viernes.
En tanto, el canciller francés Lauren Fabius declare que la destrucción del cuartel del EI y la «neutralización y erradicación» del grupo extremista es el objetivo principal de la campaña internacional.
No estaba claro en principio quiénes realizaron los ataques más recientes. La ciudad del noreste de Siria, la capital de facto del grupo, se ha convertido en el blanco principal de los ataques aéreos tras los ataques terroristas en París y la bomba que derribó un avión de pasajeros ruso en el Sinaí egipcio. EI se ha declarado responsable de esos ataques.
Un grupo activista con sede en Raqqa que informa sobre el EI, conocido como Raqqa Está Siendo Masacrada en Silencio, dijo que la mayoría de las víctimas del bombardeo se produjeron en la Escuela Heten de la ciudad, ocupada por el EI.
El Observatorio Sirio por los Derechos Humanos estimó que hubo 12 muertos, incluidos los cinco niños. La diversidad de cifras es algo común en el caos de la guerra civil siria, iniciada hace cinco años.
Rusia y una coalición encabezada por Estados Unidos que incluye a Francia han atacado Raqqa constantemente.
Una agencia afiliada al EI, Aamaq, difundió un video que dice mostrar las explosiones que iluminaron el cielo nocturno. El video muestra un edificio y varios autos en llamas y un hombre agazapado sobre los cuerpos de cinco niños. La agencia dijo que las víctimas y la destrucción fueron causados por ataques aéreos rusos a zonas civiles.
BEIRUT (AP)
