El pasado 16 de diciembre en la ciudad ucraniana de Dnipropetrovsk un camión cisterna que transportaba sustancias químicas sufrió un accidente en un barrio residencial cerca de un parque infantil, informa la web de noticias Dnepr. A causa del incidente la cisterna explotó desprendiendo su contenido y cubriendo la zona con una nauseabunda nube de gases naranjas que llegó a sentirse a kilómetros de distancia.
Las imágenes grabadas por un vecino de la localidad muestran los restos del camión cisterna emanando gases, los cuales se componían de ácido nítrico y dióxido de nitrógeno, según sospechan las autoridades locales, quienes no han logrado encontrar al conductor del camión, que desapareció del lugar tras el accidente.
A pesar de que las autoridades informaron de que la nube de dióxido de nitrógeno no supone un peligro para los residentes, lo cierto es que este gas es altamente nocivo para la salud y el medio ambiente.