El mejor chef del mundo, según la Guía Michelín, fue hallado muerto en su casa. Las primeras pericias indican que el cocinero de 44 años se suicidó con un arma de fuego.
Benoit Violier tenía 3 estrellas Michelin y su restaurante en Lausana lideraba la lista de los 1.000 mejores del planeta. El establecimiento que dirigía Violier (Hotel de Ville en Crissier) servía platos como cordero joven pirenaico o foie gras de pato crujiente.
La noticia de su muerte provocó conmoción en Suiza. Sus allegados reconocen que llevaba una vida de mucho éxito, pero estresante a la vez, según el diario Le Temps. La semana pasada, el chef había sido galardonado con el Bocus de Oro en Suiza.