El Congreso salvadoreño aprobó este miércoles un decreto que permitirá la libertad condicional a reos ancianos o aquellos que no son peligrosos y cumplen una condena no mayor a ocho años, a fin de descongestionar las cárceles. La normativa transitoria fue aprobada por el Congreso para «ayudar a descongestionar un poco» el sistema carcelario del país, explicó el diputado Yoalmo Cabrera del oficialista partido Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).
El decreto aprobado por 72 de los 84 diputados debe ser sancionado por el presidente Salvador Sánchez Cerén y luego publicado en la gaceta oficial para entrar en vigor por un plazo de un año.
Datos de la Dirección General de Centros Penales (DGCP) indican que el sistema carcelario salvadoreño alberga a poco más de 33.200 reos, cuando la capacidad instalada es para 9.000 presos.
Los beneficiados con el decreto serán reos cuyas condenas no sobrepasen los ocho años y no representen peligro para la sociedad, que hayan participado en programas de rehabilitación y mostrado buena conducta, los de más de 60 años de edad cuyos delitos no sean de gravedad y aquellos que sufran de una enfermedad terminal.
De acuerdo con el diputado Lorenzo Rivas de la derechista Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA), la DGCP deberá hacer un censo de los posibles beneficiados con la libertad condicional, que no contempla a los presos condenados por delitos graves como asesinato, extorsión, narcotráfico, secuestro o violación y tampoco beneficiará los miembros de las violentas pandillas.
Las pandillas, según las autoridades, cuentan con unos 70.000 miembros, de los cuales 13.000 están encarcelados.