Uno de los últimos supervivientes del grupo de guerrilleros que combatió junto al ‘Che‘ Guevara en Bolivia (1967), el exiliado cubano Dariel Alarcón Ramírez ‘Benigno‘, murió este jueves en las afueras de París a los 76 años, informó a la AFP uno de los biógrafos del ‘Che’, Jean Cormier. «Murió esta mañana en el hospital de Villejuif (sur de París), de un cáncer generalizado. Me lo comunicó su esposa», declaró Cormier por teléfono.
Exiliado en Francia desde 1994, ‘Benigno‘ fue autor también de una dura crítica contra el régimen de Fidel Castro, al que acusó, a través de un libro publicado tras abandonar Cuba, de haber abandonado a su suerte al ‘Che‘ en su intento de exportar la revolución a Sudamérica.
Dariel Alarcón fue uno de los tres cubanos que sobrevivieron a la emboscada del ejército boliviano contra una docena de exhaustos guerrilleros, con el argentino ‘Che‘ al frente, en los Andes, el 9 de octubre de 1967.
De aquella refriega escaparon, junto a él, los también cubanos Harry Antonio Villegas ‘Pombo’ y Leonardo Tamano ‘Urbano’, y tres bolivianos conocidos como ‘Darío’, ‘Ñato’ e ‘Inti’.
Entre octubre de 1967 y febrero de 1968, esos seis hombres cruzaron a pie los Andes, 2.000 kilómetros perseguidos por las fuerzas armadas bolivianas. Murió el ‘Ñato’ y el resto logró atravesar la cordillera hasta Chile, donde un senador de izquierdas, Salvador Allende, los recibió y gestionó su salida del país.
Los guerrilleros fueron recibidos triunfalmente en La Habana. ‘Benigno‘ lo contó posteriormente en «Benigno, último compañero del Che» (2006) que apareció originalmente en francés, cuando ya se había convertido en un acérrimo anticastrista.
Guajiro de Manzanillo
Su periplo revolucionario empezó en realidad en 1957, cuando se unió a los hermanos Castro y al ‘Che‘ en la Sierra Maestra cubana, para derribar al gobierno de Fulgencio Batista, cuyos soldados habían matado a su mujer.
Guajiro de la zona de Manzanillo (este), el ‘Che‘ le enseñó a leer y escribir. «Siempre estuvo muy apegado a Cuba, no hablaba francés. Era su manera de continuar siendo un rebelde» explicó Cormier a la AFP.
En «Memorias de un soldado cubano» (1997) explicó esas peripecias, su ascenso militar hasta llegar a coronel y su desencanto con una Revolución a la que sirvió durante décadas, en su isla natal, en Bolivia e incluso en el Congo.
Tras su exilio en Francia colaboró con biógrafos del ‘Che‘, y hasta tuvo fuerzas para regresar a Bolivia con motivo de un documental sobre los últimos días del legendario guerrillero argentino.