La sorpresiva campaña de Leicester en la liga Premier ha tenido algunos efectos secundarios.
Por un lado, el pequeño club del centro de Inglaterra que encabeza la tabla de la liga más lucrativa del fútbol ha despertado el interés y se ha ganado el cariño de todo el mundo. También está casi asegurada su primera clasificación a la Liga de Campeones, de por sí un logro casi impensable al principio de la temporada, sobre todo si vence el domingo a Southampton.
Además, ha subido como la espuma la cotización de sus jugadores, hasta hace poco casi desconocidos para los fanáticos fuera de Leicester. El martes en la derrota 2-1 ante Holanda en un amistoso, la selección de Inglaterra tuvo como titulares a dos futbolistas de los Zorros el delantero Jamie Vardy y el mediocampista Danny Drinkwater, algo que no sucedía desde hace 42 años.
Esa misma noche, N’Golo Kante, su todoterreno del mediocampo, debutó con la selección de Francia en el día de su 25to cumpleaños, y lo festejó con un gol en el triunfo 4-2 sobre Rusia.
«Las cosas están pasando rápido», dijo Kante, quien jugaba con el Caen de la segunda división de Francia hace apenas tres años.
«Hace cuatro o cinco años, no hubiese pensado que esto sería posible», comentó Vardy, quien anotó el tanto inglés ante Holanda y que hace algunos años jugaba en una liga semiprofesional y además trabajaba en una fábrica de fibra de carbón.
Tras salvarse del descenso por un pelo la temporada pasada, Leicester ha sorprendido a propios y ajenos al llegar a la recta final de esta campaña como líder de la Premier, con cinco puntos de ventaja sobre Tottenham cuando restan siete fechas en juego. El club jamás ha ganado un título en la primera división inglesa y esta listo para encarar las seis semanas más importantes en los 132 años de historia del equipo.
El técnico Claudio Ranieri no contó con muchos de sus jugadores que fueron convocados a sus respectivas selecciones en las recientes fechas FIFA, una situación que no solía suceder. Por lo tanto, el timonel italiano tiene que asegurarse que sus jugadores lleguen enchufados p
Southampton podría ser uno de los oponentes más difíciles que le restan a Leicester, ya que el equipo viene de ganar sus dos últimos partidos para acercarse a cuatro puntos de los puestos de Champions.
Pero Leicester ha exhibido una increíble fortaleza cada vez que encara presión, y ha ganado sus tres últimos compromisos por marcadores idénticos de 1-0.