Policías y fiscales salvadoreños allanaron este viernes una sucursal del bufete panameño Mossack Fonseca, epicentro del escándalo de los Panamá Papers, ubicado en el sector oeste de San Salvador.
«Buena cantidad de equipo informático se ha encontrado dentro de las oficinas de Mossack Fonseca, colonia Escalón», escribió en su cuenta en Twitter la Fiscalía General de la República (FGR). El Fiscal general, Douglas Meléndez, se presentó al local y prometió brindar declaraciones sobre el procedimiento, que se prolongaba durante la tarde de este viernes.
Tras el escándalo de los Panamá Papers, los encargados de la oficina retiraron el cartel con el nombre de la empresa en su local ubicado en el transitado Paseo General Escalón, sector oeste de San Salvador. «Empleados de Mossack Fonseca quitaron el rótulo ayer(jueves).
El encargado asegura que es porque se están trasladando», precisó la Fiscalía. El diario digital El Faro publicó el domingo que «más de 220 empresas offshore fueron creadas bajo la sombrilla de la firma panameña de abogados Mossack Fonseca, que entre 2000 y 2015 trabajó con al menos 33 clientes salvadoreños», para realizar transacciones.
Las empresas creadas para «garantizar el anonimato de sus propietarios», según El Faro, han sido usadas para efectuar transacciones de cientos de miles de dólares, compra de inmuebles en El Salvador o celebrar convenios con municipalidades salvadoreñas».