Un cortocircuito sería la causa de un incendio que consumió 70 metros cuadrados de la ferretería El Pipiolo, en Plaza González Víquez, Costa Rica, donde 5 minutos antes habían cerrado las cortinas metálicas.
El edifico de 750 metros cuadrados se vio amenazado, sin embargo la rápida acción de los bomberos evitó una tragedia de mayores proporciones.
El personal se devolvió a abrir las cortinas para el fácil ingreso de los bomberos. Ricardo Mora, jefe de los apagafuego de Costa Rica, manifestó que se trabajó con diferentes máquinas para controlar el incendio.
Afortunadamente se actuó eficientemente con máquinas extintoras, una plataforma, una unidad paramédica y de materiales peligrosos debido a que había pinturas, madera y resinas que nos podían complicar la labor. Al final solo se vio afectado un sector de dos plantas, donde no había personal y que controlaron 25 bomberos que combatieron de manera oportuna, explicó.
Roberto Jiménez, empleado de la ferretería El Pipiolo, lamentó lo sucedido, sin embargo dijo que la emergencia pudo haber sido mayor. Recién habíamos salido y nos dijeron que se estaba quemando donde trabajamos, ahí hay herramientas, sacos de cemento y diluyente, por dicha no afectó mucho y todos estamos bien. No sabemos qué pudo haber pasado, dijo.
Los bomberos hacen un llamado a la ciudadanía para que verifique los sistemas eléctricos y cuando abandone oficinas se cercioren de que todo esté apagado para evitar cortocircuito que provoquen incendios que solamente dejan jaranas y desgracia a los comerciantes.
